Manolito Simonet y su Trabuco.
Orquesta de música popular bailableManolito Simonet para todos los cubanos. Nació en la provincia de Camaguey, el 18 de abril de 1961, es pianista, tecladista, arreglista y compositor. Gracias a su experiencia en la Orquesta Maravillas de Florida, logra fundar una nueva orquesta en febrero de 1993, donde presenta un proyecto de música cubana inspirado en las raíces más puras aunque persiguiendo sonoridades tímbrico-armónicas contemporáneas y utilizando textos, en su mayoría de su propia creación con temáticas diversas bien elaboradas.
Desde sus primeras grabaciones consigue la aceptación de su público y se pega con temas como: Todavía No, Marcando la Distancia, El Águila, Papirriqui con Guaniquiqui, María Luisa y la Parranda, entre otros. En el año 1994 le otorgan el Premio de la Orquesta Revelación; con una sólida formación musical y dotado de gran talento, Manolito decide reforzar su nuevo Trabuco, adicionando al formato charanga, trombones, trompetas y ampliando la percusión, con lo que logra conseguir un sonido pesado, fuerte, pero a la vez refinado, al decir de los críticos, que le imprime a su música un sello muy particular.
A pesar de su corta carrera, ha grabado ya cuatro CD, los cuales han sido de gran aceptación. Se han presentado en todos estos años en numerosos escenarios: Italia, Dinamarca, Suecia, Noruega, Gran Bretaña, Bélgica, EE.UU, Perú, Colombia, México, Martinica, Portugal, España, Francia, Alemania, Suiza. Logrando un rotundo éxito en cada uno de ellos.
Manolito se mueve por lo géneros del son, el bolero, el chachachá, danzón, timba, guaracha, cumbia, ballenato y otros ritmos cubanos y caribeños, muchos temas de su autoría han sido grabados por otras orquestas y solistas cubanos. También ha creado música para el cine. Ha recibido numerosos premios y condecoraciones por la labor desplegada durante todos estos años.
Manolito Simonet Rompió los Termómetros
Manolito no es un músico de alta escuela, más bien es un autodidacta; pero sabe muy bien las exigencias del bailador, el oficio de la dirección de orquesta, la composición y la orquestación para lograr una orquesta triunfadora, en un país donde pululan las grandes bandas de música.
Manolito procede de Camaguey, provincia del centro del país, "allá me inicié en el Movimiento de Aficionados donde voy aprendiendo el tres y el piano, dos instrumentos que tienen mucho en común. Cuando contaba con unos 22 años se profesionalizó con agrupaciones como: Lágrimas Negras, la Orquesta Inspiración, la Orquesta Maravillas de Florida y en La Habana estuve con el grupo de Senén Suárez".
La Orquesta Maravillas de Florida es una de las más reconocidas en Camaguey y en la zona del interior de Cuba. Manolito se mantuvo unos 17 años como director, compositor y orquestador, buscando un concepto musical distinto al de la charanga La Aragón que siempre fue su inspiradora. "Con la Maravilla grabamos cuatro discos que tienen un sonido diferente: Recuerdo títulos como: Soy el negro, Y ya para qué. Con ese estilo diferente tocamos en muchos pueblos de Cuba".
Manolito llega a La Habana en los momentos en que estaba de moda el Boom de la salsa cubana, un verdadero fenómeno musical de masas. "Sabía que había una fiebre por las orquestas de tipo jazz band, pero yo tenía la influencia de las charangas, estaba el ejemplo de Los Van Van y por otra parte estaba la influencia de los conjuntos soneros: Arsenio, Chapottín, El Casino, La Sonora Matancera, Rumbavana, de la cual bebió Adalberto y su Son.".
Manolito fundió el formato de charanga con conjunto: flauta, violines, violencello, con trompetas y trombones; buscando fuerza sonora. Después más adelante añade batería y sintetizador, por las exigencias de los bailes masivos para grandes multitudes. "La banda tiene que sonar duro, bien afro", asegura el compositor de Caballo grande.
La pianística de Simonet se mueve entre Joseíto González (Rumbavana) y César Pedroso (Van Van), aunque incluye también a otros clásicos como Peruchín, Lilí Martínez y Rubén González. Un piano a contratiempo, asimétrico, a la manera de los ritmos cubanos.
Las letras de las canciones del Trabuco han pegado en la gente de la calle, en el bailador. A pesar de haber sido interpretadas por diversos cantantes que han cambiado de agrupaciones, es curioso que todos han mantenido la línea tímbrica y conceptual de la orquesta. Rosendo Díaz (El gallo), una voz campestre se ajustó muy bien con una composición como La Parranda, un verdadero hit internacional de José Valladares. El Águila también grabado por El Gallo, una canción muy ingeniosa, con aquello de "agárrate del ala" fue otro éxito del hit parade.
Cuando Carlos Manuel Kalunga gana el Premio de Buscando el Sonero en el programa Mi salsa, rápidamente Manolito lo coloca en la orquesta y lo pone en la preferencia nacional. La llegada de Sixto Llorente (El Indio de la Orquesta Aliamén), dicen que llegó tarde al Trabuco, pero Manolito, ni corto, ni perezoso lo ajustó a la mecánica de la orquesta y lo lanzó a la popularidad con un cañonazo en 1999 -antes de concluir el milenio-: Marcando la distancia "Tu pa´llá y yo pa´cá", una interpretación que impresionó al candelero musical cubano, con esa fuerza telúrica y mestiza del Indio santaclareño.
Hasta el hijo de Estanislao Sureda (Laíto), dejó su impronta en esta orquesta que siempre estuvo decidida a triunfar frente al exigente bailador. Pero uno de los más resonantes éxitos de Manolito fue la canción cantada por Ricardo Amaray: Locos por mi Habana, una especie de himno callejero.
Los premios para El Trabuco no se han hecho esperar. Cuando pocos confiaban en su triunfo, Manolito se alzó como la orquesta bailable más popular de 1994. Posteriormente los triunfos fueron uno detrás de otro. La disquera Eurotropical contribuyó mucho a su difusión por el campo europeo.
Aunque en EE.UU. con el disco Contra todos los pronósticos se alzó con el Premio en la categoría de Música Tropical ASCAP, una especie de Grammy.
En Cuba se encuentra entre las bandas más premiadas en los últimos años: Premio Música Bailable Cubadisco 1999. También repiten en el 2000 con el disco Se rompieron los termómetros. Y en el 2004 arrasaron en el Premio EGREM con tres galardones: Disco más vendido/ Premio Crítica/ y Gran Premio en la categoría de Música Bailable/, nada menos que frente a Los Van Van con su disco Chapeando, que es mucho decir.
Después de este triunfo Manolito conversaba conmigo acerca de su triunfo y con mucha sencillez me explicaba la excelente factura de su disco Locos por mi Habana, trabajado con mucha inteligencia.
Simonet desde su comienzo, cuando estrenó su banda el 25 de febrero de 1993, en el Salón La Tropical -frente a Los Van Van- siempre supo hacia dónde conducía su nave musical. "Nos enfilamos hacia el bailador que es quien nos guía en los coros, los montunos, en todo".
Por Rafael Lam
laconga.org
Julio 2005
Orquesta salsera.
Manuel Simonet Pérez -pianista, compositor, arreglista, productor discográfico y director de orquesta- nació en Camagüey, Cuba, el 18 de abril de 1961. Desde niño, Manolito Simonet muestra interés por la música, inicialmente por la percusión, y comienza a estudiarla de forma empírica. Siendo muy joven se vincula al Movimiento de Artistas Aficionados en provincia natal, y así va aprendiendo a tocar el piano y el tres.
Viaja a La Habana y trabaja ocasionalmente con varios grupos como los de Roberto Faz y Senén Suárez. De regreso a su natal Camagüey, en los albores de los años 80, integra como músico profesional las agrupaciones "Lágrimas Negras" e Inspiración, hasta que se incorporó a la célebre charanga Maravilla de Florida, a la que realizó notables aportes con sus poderosas orquestaciones, y en la que se mantuvo durante varios años, llegando a ser su director.
Ya siendo músico activo, Manolito cursa estudios académicos de percusión y armonía, a la par que continuó su intensa preparación autodidacta.
Su dinámica creativa y su carácter emprendedor, lo llevó a formar su propia orquesta, "Manolito Simonet y su Trabuco", cuyo debut de produjo en el famoso Salón Rosado Benny Moré de la Tropical, en el corazón de La Habana, el 25 de febrero de 1993, compartiendo escenario con Juan Formell y Los Van Van.
Este genial músico había soñado tener una orquesta con un sonido diferente al del resto; para lograrlo, optó por la unión feliz de los violines con los metales (trompetas y trombones); fundió los formatos de charanga y conjunto, buscando una sonoridad compacta, y triunfó su trabajo musical, que parte de las raíces de la música popular cubana con el empleo de sonoridades tímbrico-armónicas contemporáneas, utilizando textos de cuidada elaboración, muchas veces de su propia autoría, a través de los cuales aborda diversas temáticas ligadas a la vida cotidiana de los cubanos.
En1994, el programa "Mi Salsa", uno de los de mayor audiencia entonces en la televisión cubana, consagra a Manolito Simonet y su Trabuco como la orquesta Revelación del Año.
El auge de la orquesta ha sido imbatible desde entonces. En 1995 realizan debut discográfico para el sello EGREM, con el CD "Directo al corazón". La primera incursión internacional de la orquesta se produce en Colombia, gira que se prolongó durante varios meses, y al regresar a Cuba, ya la pieza "Después de ti", incluida en este primer álbum, se encontraba entre las predilectas de los bailadores cubanos.
En 1996 son fichados por la disquera española Eurotropical, y se refuerza la popularidad de la orquesta con la salida al mercado del álbum "Contra todos los pronósticos". Un año más tarde ya la agrupación resultaba la revelación de la música cubana en Europa.
"Marcando la distancia" fue la siguiente propuesta discográfica de Manolito Simonet (con obras musicales exitosas como "Tu pa´llá y yo pa´cá") la cual le valió el Premio Cubadisco 1999 en la categoría de música bailable. También en 1998 le fue conferido el Premio de la Sociedad de Compositores, Autores y Publicistas de los Estados Unidos (ASCAP), en la categoría de música tropical por la canción "El Águila", tema que fue un relevante suceso comercial en la historia de la orquesta.
Su posición privilegiada entre los bailadores cubanos se consolida, y se suceden incontables giras internacionales, entre ellas a Perú, Martinica, Portugal, España, Francia, Alemania, Suiza, Italia, Dinamarca, Suecia, Noruega, Gran Bretaña, Bélgica y casi todos los países de Europa. La variedad de géneros que aborda la orquesta es clave sustancial de su éxito, y el mundo disfruta de la salsa, el bolero, el cha cha chá, la guaracha, el danzón, la cumbia, el ballenato y otros ritmos cubanos y caribeños, en el estilo inigualable de Manolito Simonet.
Indetenible continuó Simonet, junto a sus músicos, escalando hasta la cima del éxito con sus célebres discos "Para que baile Cuba" (2000) y "Se rompieron los termómetros" (2001), hasta que en el año 2004 se consagran con el CD "Locos por mi Habana", con el que obtienen en Premio EGREM 2005 en los apartados de música bailable y disco del año, además del reconocimiento unánime de la crítica y de resultar este el disco más vendido en Cuba y en el extranjero.
El año 2006 ha sido también para Manolito un período valioso y feliz, ya que vieron la luz la séptima producción discográfica de su orquesta, "Hablando en serio", así como el excelente CD-DVD "Knock Out", fruto de un concierto en vivo que compartiera en La Habana con Lázaro Valdés y Bamboleo.
Giras, discos exitosos, premios y reconocimientos, tanto nacionales e internacionales, han sido constantes retribuciones al quehacer musical de Manolito Simonet y su Trabuco, orquesta que ocupa un codiciado lugar de preferencia entre los que gustan de la música bailable en todo el mundo.
Beat Cubano
Los que se esperaban un nuevo álbum de música bailable, se sentirán decepcionados u agradablemente sorprendido por este nuevo disco de Manolito Simonet, el resultado de la incursión de este músico fenomenal en el Afro Cuban Jazz. No debería sorprendernos, porque el vínculo de Cuba con el jazz es muy estrecho y lanza sus raíces muy atrás en el tiempo.
Manolito y su Trabuco Beat CubanoSin duda, la riqueza de la música cubana nació de la combinación de diferentes culturas, la africana, la española y francesa, sino también de la estadounidense. De hecho, el siglo pasado fue testigo desde los años ‘30 de un extraordinario fenómeno de intensa ósmosis mutua con el jazz, aunque los primeros contactos remontan a finales del XIX siglo y a comienzos del siglo XX, gracias a la llegada a Cuba de soldados estadounidenses negros durante la Guerra Hispano-americana. Este singular proceso de transculturación musical, impulsó a un grupo excepcional de artistas como Machito, Mario Bauzá, Dizzy Gillespie y Chano Pozo, quien se reunió en ese crisol de culturas extraordinarias en la Gran Manzana a concretar y promover, en los años 40, un género que hoy en día es conocido como latin jazz, que directa o indirectamente acabó para implicar las bandas de jazz del momento y músicos como Charlie Parker y Stan Kenton Bird, que se enredaron con la experiencia de Mario Bauzá y Machito y sus Afrocubanos. Incluso a principios de los '70, Cuba se vuelve protagonista en el jazz con un grupo de talentosos jóvenes músicos con gran inventiva como Chucho Valdés, Paquito D 'Rivera, Salvador Emiliano, Guillermo Barreto y Enrique Pla, que lograron dar un nuevo impulso a este género musical con su entusiasmo, talento y inspiración.
Beat Cubano (Bis-Music 2010) nos propone un Manolito Simonet diferente al que todo el mundo suele escuchar y bailar. Beat Cubano es un proyecto musical de Afro-Cuban-Jazz, una colaboración del Trabuco con los artistas cubanos que se mueven a gusto en este género, como el saxofonista German Velazco (Irakere), Emilio Vega, Chucho Valdés, Orlando "Maraca" Valle y José Luís Cortés "El Tosco ".
Los arreglos son frescos, modernos y atractivos, la mayoría de los cuales realizados por Miguel Ángel de Armas “Pan con Salsa”, teclado vigente del Trabuco y ex miembro histórico de NG La Banda, que también compuso dos temas de este álbum. Otras canciones son arregladas por el mismo Manolito Simonet, German Velazco y Emilio Vega.
A Flautazo Limpio, compuesto y arreglado por German Velazco, celebra un instrumento fundamental que caracteriza ampliamente la música tradicional cubana desde sus inicios, y cuenta con la participación de invitados de excepción. Además del mismo Velazco, de hecho participan los flautistas Orlando "Maraca" Valle y José Luís Cortés "El Tosco". El Danzón y Yo es un homenaje de Manolito Simonet al Danzón, genero bailable autóctono derivado de la danza criolla, aquí realizado por Manolito con un sabor y orquestación muy modernos pero guiñando un ojo a la tradición. Aquí, Miguelito "Pan con Salsa" demuestra su virtuosismo con un hermoso solo de piano. ¿Que le pasa a Tata Güines? es el ineludible tributo de Miguel Ángel de Armas al heredero natural de Chano Pozo, el fallecido Tata Güines, que sigue una primera versión incluida en el de disco Control, lanzado en 2008. En esta nueva versión, fue invitado el fenomenal Grupo Rumbatá. Verano es una canción compuesta y arreglada por Manolito Simonet, el vibráfono solista es de Emilio Vega. Timbalia, escrito y arreglado por Emilio Vega nos permite degustar un extraordinario Roicel Riverón. Roicel es sin duda uno de los mejores timbaleros /percusionistas cubanos de la nueva generación, lo reafirma tocando los timbales en este nuevo disco, y especialmente en este tema, brindando un rico solo que también pone de manifiesto el eclecticismo maduro de este joven percusionista del Trabuco. Por último, pero no menos importante, no podía faltar el "cameo" del maestro Chucho Valdés en la revisitación de un clásico con su inconfundible toque, se trata de Bésame Mucho de Consuelo Velázquez , una interpretación que llega “directa al corazón” y que literalmente nos arrebata.
Tras las huellas de Irakere, NG La Banda, Klimax y Maraca, a gusto, tanto en la música popular bailable cubana que en el jazz, igualmente Manolito Simonet y sus músicos nos dan una gran prueba de talento y versatilidad musical.
1. A Flautazo Limpio 4:59
2. El Danzón Y Yo 4:19
3. Ike 5:10
4. Sometime Ago 6:18
5. ¿Güines, Que Le Pasa A Tata? 4:07
6. Son City 5:41
7. Tenderly 7:25
8. Verano 4:05
9. Timbalia 4:45
10. Bésame Mucho 7:05
Desde sus primeras grabaciones consigue la aceptación de su público y se pega con temas como: Todavía No, Marcando la Distancia, El Águila, Papirriqui con Guaniquiqui, María Luisa y la Parranda, entre otros. En el año 1994 le otorgan el Premio de la Orquesta Revelación; con una sólida formación musical y dotado de gran talento, Manolito decide reforzar su nuevo Trabuco, adicionando al formato charanga, trombones, trompetas y ampliando la percusión, con lo que logra conseguir un sonido pesado, fuerte, pero a la vez refinado, al decir de los críticos, que le imprime a su música un sello muy particular.
A pesar de su corta carrera, ha grabado ya cuatro CD, los cuales han sido de gran aceptación. Se han presentado en todos estos años en numerosos escenarios: Italia, Dinamarca, Suecia, Noruega, Gran Bretaña, Bélgica, EE.UU, Perú, Colombia, México, Martinica, Portugal, España, Francia, Alemania, Suiza. Logrando un rotundo éxito en cada uno de ellos.
Manolito se mueve por lo géneros del son, el bolero, el chachachá, danzón, timba, guaracha, cumbia, ballenato y otros ritmos cubanos y caribeños, muchos temas de su autoría han sido grabados por otras orquestas y solistas cubanos. También ha creado música para el cine. Ha recibido numerosos premios y condecoraciones por la labor desplegada durante todos estos años.
Manolito Simonet Rompió los Termómetros
Manolito no es un músico de alta escuela, más bien es un autodidacta; pero sabe muy bien las exigencias del bailador, el oficio de la dirección de orquesta, la composición y la orquestación para lograr una orquesta triunfadora, en un país donde pululan las grandes bandas de música.
Manolito procede de Camaguey, provincia del centro del país, "allá me inicié en el Movimiento de Aficionados donde voy aprendiendo el tres y el piano, dos instrumentos que tienen mucho en común. Cuando contaba con unos 22 años se profesionalizó con agrupaciones como: Lágrimas Negras, la Orquesta Inspiración, la Orquesta Maravillas de Florida y en La Habana estuve con el grupo de Senén Suárez".
La Orquesta Maravillas de Florida es una de las más reconocidas en Camaguey y en la zona del interior de Cuba. Manolito se mantuvo unos 17 años como director, compositor y orquestador, buscando un concepto musical distinto al de la charanga La Aragón que siempre fue su inspiradora. "Con la Maravilla grabamos cuatro discos que tienen un sonido diferente: Recuerdo títulos como: Soy el negro, Y ya para qué. Con ese estilo diferente tocamos en muchos pueblos de Cuba".
Manolito llega a La Habana en los momentos en que estaba de moda el Boom de la salsa cubana, un verdadero fenómeno musical de masas. "Sabía que había una fiebre por las orquestas de tipo jazz band, pero yo tenía la influencia de las charangas, estaba el ejemplo de Los Van Van y por otra parte estaba la influencia de los conjuntos soneros: Arsenio, Chapottín, El Casino, La Sonora Matancera, Rumbavana, de la cual bebió Adalberto y su Son.".
Manolito fundió el formato de charanga con conjunto: flauta, violines, violencello, con trompetas y trombones; buscando fuerza sonora. Después más adelante añade batería y sintetizador, por las exigencias de los bailes masivos para grandes multitudes. "La banda tiene que sonar duro, bien afro", asegura el compositor de Caballo grande.
La pianística de Simonet se mueve entre Joseíto González (Rumbavana) y César Pedroso (Van Van), aunque incluye también a otros clásicos como Peruchín, Lilí Martínez y Rubén González. Un piano a contratiempo, asimétrico, a la manera de los ritmos cubanos.
Las letras de las canciones del Trabuco han pegado en la gente de la calle, en el bailador. A pesar de haber sido interpretadas por diversos cantantes que han cambiado de agrupaciones, es curioso que todos han mantenido la línea tímbrica y conceptual de la orquesta. Rosendo Díaz (El gallo), una voz campestre se ajustó muy bien con una composición como La Parranda, un verdadero hit internacional de José Valladares. El Águila también grabado por El Gallo, una canción muy ingeniosa, con aquello de "agárrate del ala" fue otro éxito del hit parade.
Cuando Carlos Manuel Kalunga gana el Premio de Buscando el Sonero en el programa Mi salsa, rápidamente Manolito lo coloca en la orquesta y lo pone en la preferencia nacional. La llegada de Sixto Llorente (El Indio de la Orquesta Aliamén), dicen que llegó tarde al Trabuco, pero Manolito, ni corto, ni perezoso lo ajustó a la mecánica de la orquesta y lo lanzó a la popularidad con un cañonazo en 1999 -antes de concluir el milenio-: Marcando la distancia "Tu pa´llá y yo pa´cá", una interpretación que impresionó al candelero musical cubano, con esa fuerza telúrica y mestiza del Indio santaclareño.
Hasta el hijo de Estanislao Sureda (Laíto), dejó su impronta en esta orquesta que siempre estuvo decidida a triunfar frente al exigente bailador. Pero uno de los más resonantes éxitos de Manolito fue la canción cantada por Ricardo Amaray: Locos por mi Habana, una especie de himno callejero.
Los premios para El Trabuco no se han hecho esperar. Cuando pocos confiaban en su triunfo, Manolito se alzó como la orquesta bailable más popular de 1994. Posteriormente los triunfos fueron uno detrás de otro. La disquera Eurotropical contribuyó mucho a su difusión por el campo europeo.
Aunque en EE.UU. con el disco Contra todos los pronósticos se alzó con el Premio en la categoría de Música Tropical ASCAP, una especie de Grammy.
En Cuba se encuentra entre las bandas más premiadas en los últimos años: Premio Música Bailable Cubadisco 1999. También repiten en el 2000 con el disco Se rompieron los termómetros. Y en el 2004 arrasaron en el Premio EGREM con tres galardones: Disco más vendido/ Premio Crítica/ y Gran Premio en la categoría de Música Bailable/, nada menos que frente a Los Van Van con su disco Chapeando, que es mucho decir.
Después de este triunfo Manolito conversaba conmigo acerca de su triunfo y con mucha sencillez me explicaba la excelente factura de su disco Locos por mi Habana, trabajado con mucha inteligencia.
Simonet desde su comienzo, cuando estrenó su banda el 25 de febrero de 1993, en el Salón La Tropical -frente a Los Van Van- siempre supo hacia dónde conducía su nave musical. "Nos enfilamos hacia el bailador que es quien nos guía en los coros, los montunos, en todo".
Por Rafael Lam
laconga.org
Julio 2005
Orquesta salsera.
Manuel Simonet Pérez -pianista, compositor, arreglista, productor discográfico y director de orquesta- nació en Camagüey, Cuba, el 18 de abril de 1961. Desde niño, Manolito Simonet muestra interés por la música, inicialmente por la percusión, y comienza a estudiarla de forma empírica. Siendo muy joven se vincula al Movimiento de Artistas Aficionados en provincia natal, y así va aprendiendo a tocar el piano y el tres.
Viaja a La Habana y trabaja ocasionalmente con varios grupos como los de Roberto Faz y Senén Suárez. De regreso a su natal Camagüey, en los albores de los años 80, integra como músico profesional las agrupaciones "Lágrimas Negras" e Inspiración, hasta que se incorporó a la célebre charanga Maravilla de Florida, a la que realizó notables aportes con sus poderosas orquestaciones, y en la que se mantuvo durante varios años, llegando a ser su director.
Ya siendo músico activo, Manolito cursa estudios académicos de percusión y armonía, a la par que continuó su intensa preparación autodidacta.
Su dinámica creativa y su carácter emprendedor, lo llevó a formar su propia orquesta, "Manolito Simonet y su Trabuco", cuyo debut de produjo en el famoso Salón Rosado Benny Moré de la Tropical, en el corazón de La Habana, el 25 de febrero de 1993, compartiendo escenario con Juan Formell y Los Van Van.
Este genial músico había soñado tener una orquesta con un sonido diferente al del resto; para lograrlo, optó por la unión feliz de los violines con los metales (trompetas y trombones); fundió los formatos de charanga y conjunto, buscando una sonoridad compacta, y triunfó su trabajo musical, que parte de las raíces de la música popular cubana con el empleo de sonoridades tímbrico-armónicas contemporáneas, utilizando textos de cuidada elaboración, muchas veces de su propia autoría, a través de los cuales aborda diversas temáticas ligadas a la vida cotidiana de los cubanos.
En1994, el programa "Mi Salsa", uno de los de mayor audiencia entonces en la televisión cubana, consagra a Manolito Simonet y su Trabuco como la orquesta Revelación del Año.
El auge de la orquesta ha sido imbatible desde entonces. En 1995 realizan debut discográfico para el sello EGREM, con el CD "Directo al corazón". La primera incursión internacional de la orquesta se produce en Colombia, gira que se prolongó durante varios meses, y al regresar a Cuba, ya la pieza "Después de ti", incluida en este primer álbum, se encontraba entre las predilectas de los bailadores cubanos.
En 1996 son fichados por la disquera española Eurotropical, y se refuerza la popularidad de la orquesta con la salida al mercado del álbum "Contra todos los pronósticos". Un año más tarde ya la agrupación resultaba la revelación de la música cubana en Europa.
"Marcando la distancia" fue la siguiente propuesta discográfica de Manolito Simonet (con obras musicales exitosas como "Tu pa´llá y yo pa´cá") la cual le valió el Premio Cubadisco 1999 en la categoría de música bailable. También en 1998 le fue conferido el Premio de la Sociedad de Compositores, Autores y Publicistas de los Estados Unidos (ASCAP), en la categoría de música tropical por la canción "El Águila", tema que fue un relevante suceso comercial en la historia de la orquesta.
Su posición privilegiada entre los bailadores cubanos se consolida, y se suceden incontables giras internacionales, entre ellas a Perú, Martinica, Portugal, España, Francia, Alemania, Suiza, Italia, Dinamarca, Suecia, Noruega, Gran Bretaña, Bélgica y casi todos los países de Europa. La variedad de géneros que aborda la orquesta es clave sustancial de su éxito, y el mundo disfruta de la salsa, el bolero, el cha cha chá, la guaracha, el danzón, la cumbia, el ballenato y otros ritmos cubanos y caribeños, en el estilo inigualable de Manolito Simonet.
Indetenible continuó Simonet, junto a sus músicos, escalando hasta la cima del éxito con sus célebres discos "Para que baile Cuba" (2000) y "Se rompieron los termómetros" (2001), hasta que en el año 2004 se consagran con el CD "Locos por mi Habana", con el que obtienen en Premio EGREM 2005 en los apartados de música bailable y disco del año, además del reconocimiento unánime de la crítica y de resultar este el disco más vendido en Cuba y en el extranjero.
El año 2006 ha sido también para Manolito un período valioso y feliz, ya que vieron la luz la séptima producción discográfica de su orquesta, "Hablando en serio", así como el excelente CD-DVD "Knock Out", fruto de un concierto en vivo que compartiera en La Habana con Lázaro Valdés y Bamboleo.
Giras, discos exitosos, premios y reconocimientos, tanto nacionales e internacionales, han sido constantes retribuciones al quehacer musical de Manolito Simonet y su Trabuco, orquesta que ocupa un codiciado lugar de preferencia entre los que gustan de la música bailable en todo el mundo.
Beat Cubano
Los que se esperaban un nuevo álbum de música bailable, se sentirán decepcionados u agradablemente sorprendido por este nuevo disco de Manolito Simonet, el resultado de la incursión de este músico fenomenal en el Afro Cuban Jazz. No debería sorprendernos, porque el vínculo de Cuba con el jazz es muy estrecho y lanza sus raíces muy atrás en el tiempo.
Manolito y su Trabuco Beat CubanoSin duda, la riqueza de la música cubana nació de la combinación de diferentes culturas, la africana, la española y francesa, sino también de la estadounidense. De hecho, el siglo pasado fue testigo desde los años ‘30 de un extraordinario fenómeno de intensa ósmosis mutua con el jazz, aunque los primeros contactos remontan a finales del XIX siglo y a comienzos del siglo XX, gracias a la llegada a Cuba de soldados estadounidenses negros durante la Guerra Hispano-americana. Este singular proceso de transculturación musical, impulsó a un grupo excepcional de artistas como Machito, Mario Bauzá, Dizzy Gillespie y Chano Pozo, quien se reunió en ese crisol de culturas extraordinarias en la Gran Manzana a concretar y promover, en los años 40, un género que hoy en día es conocido como latin jazz, que directa o indirectamente acabó para implicar las bandas de jazz del momento y músicos como Charlie Parker y Stan Kenton Bird, que se enredaron con la experiencia de Mario Bauzá y Machito y sus Afrocubanos. Incluso a principios de los '70, Cuba se vuelve protagonista en el jazz con un grupo de talentosos jóvenes músicos con gran inventiva como Chucho Valdés, Paquito D 'Rivera, Salvador Emiliano, Guillermo Barreto y Enrique Pla, que lograron dar un nuevo impulso a este género musical con su entusiasmo, talento y inspiración.
Beat Cubano (Bis-Music 2010) nos propone un Manolito Simonet diferente al que todo el mundo suele escuchar y bailar. Beat Cubano es un proyecto musical de Afro-Cuban-Jazz, una colaboración del Trabuco con los artistas cubanos que se mueven a gusto en este género, como el saxofonista German Velazco (Irakere), Emilio Vega, Chucho Valdés, Orlando "Maraca" Valle y José Luís Cortés "El Tosco ".
Los arreglos son frescos, modernos y atractivos, la mayoría de los cuales realizados por Miguel Ángel de Armas “Pan con Salsa”, teclado vigente del Trabuco y ex miembro histórico de NG La Banda, que también compuso dos temas de este álbum. Otras canciones son arregladas por el mismo Manolito Simonet, German Velazco y Emilio Vega.
A Flautazo Limpio, compuesto y arreglado por German Velazco, celebra un instrumento fundamental que caracteriza ampliamente la música tradicional cubana desde sus inicios, y cuenta con la participación de invitados de excepción. Además del mismo Velazco, de hecho participan los flautistas Orlando "Maraca" Valle y José Luís Cortés "El Tosco". El Danzón y Yo es un homenaje de Manolito Simonet al Danzón, genero bailable autóctono derivado de la danza criolla, aquí realizado por Manolito con un sabor y orquestación muy modernos pero guiñando un ojo a la tradición. Aquí, Miguelito "Pan con Salsa" demuestra su virtuosismo con un hermoso solo de piano. ¿Que le pasa a Tata Güines? es el ineludible tributo de Miguel Ángel de Armas al heredero natural de Chano Pozo, el fallecido Tata Güines, que sigue una primera versión incluida en el de disco Control, lanzado en 2008. En esta nueva versión, fue invitado el fenomenal Grupo Rumbatá. Verano es una canción compuesta y arreglada por Manolito Simonet, el vibráfono solista es de Emilio Vega. Timbalia, escrito y arreglado por Emilio Vega nos permite degustar un extraordinario Roicel Riverón. Roicel es sin duda uno de los mejores timbaleros /percusionistas cubanos de la nueva generación, lo reafirma tocando los timbales en este nuevo disco, y especialmente en este tema, brindando un rico solo que también pone de manifiesto el eclecticismo maduro de este joven percusionista del Trabuco. Por último, pero no menos importante, no podía faltar el "cameo" del maestro Chucho Valdés en la revisitación de un clásico con su inconfundible toque, se trata de Bésame Mucho de Consuelo Velázquez , una interpretación que llega “directa al corazón” y que literalmente nos arrebata.
Tras las huellas de Irakere, NG La Banda, Klimax y Maraca, a gusto, tanto en la música popular bailable cubana que en el jazz, igualmente Manolito Simonet y sus músicos nos dan una gran prueba de talento y versatilidad musical.
1. A Flautazo Limpio 4:59
2. El Danzón Y Yo 4:19
3. Ike 5:10
4. Sometime Ago 6:18
5. ¿Güines, Que Le Pasa A Tata? 4:07
6. Son City 5:41
7. Tenderly 7:25
8. Verano 4:05
9. Timbalia 4:45
10. Bésame Mucho 7:05
¿Güines, Que Le Pasa A Tata?
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