Gracia Negra -CRIOJAZZ-

El Duo...
ALEX TORRES
La voz líder de GRACIA NEGRA es considerada uno de los cantantes más completos, por la virtud de los recursos artísticos expuestos en su forma de entender el canto. Este artista inició su carrera desde siempre; en la escuela, en la esquina, en la sala ya se comentaba de su don. Como profesional debutó muy temprano siendo vocalista del juvenil grupo Alma del Barrio, (segunda division del Grupo Niche) producido por Jairo Varela. Después de su paso por importantes orquestas nacionales se posicionó en la tarima internacional como voz líder de Guayacán Orquesta poniendo en su sitio los temas: (Dormida en mi hamaca, Libre y Rey de Burlas) triunfando en grandes escenarios del mundo como el apetecido Madison Square Garden de Nueva York, y sus pares en Europa, Canadá y Latinoamerica. La jerarquía de los artistas que a acompañado refuerzan este postulado: Andy Montañés, Cano Estremera, Rey Ruiz, Maelo Ruiz, Willie González, Amilcar Boscán, Pedro Conga, Mulenze, Richie Valdés entre otros, pero la rúbrica de su elegancia, madurez y carácter vocal la imprime en el primer disco con GRACIA NEGRA, hecho con el arte y secreto de los trajes finos. A la medida.

LEY RODRIGUEZ
Compositor y productor general de GRACIA NEGRA. Desde niño cultivó su afición por la observación, la creación literaria y artística. Como profesional fue director musical de Alma del Barrio, y en el área social a desarrollado proyectos de sociales en cultura y educación, escritor, humorista.

CALLE LIRICA
La primera producción de Gracia Negra, es una escena salsero expresiva, romántico, social, alegre, espiritual, reflexiva. Una exposición, una forma de hacer salsa moderna con un contenido de elementos para los que bailan, y para los que escuchan. Producido en Bogotá, Cali, Cartagena, Nueva York contó con la participación de músicos artistas de gran envergadura. La presentación en sociedad de este trabajo fue exitosamente premonitoria. Gracia Negra ganó el primer puesto como mejor propuesta artística urbana, en el ciclo de conciertos del Instituto Distrital de Cultura y Turismo de Bogotá, en un amplio proceso de selección con bandas locales e internacionales de gran nivel.
¡De voceador de prensa a estrella de la salsa!
El hombre es de tez blanca pero tiene alma de negro. Lo dice su tumbao, su sabrosura, su caminar acompasado con el ritmo candente que corre acelerado por sus venas. Es Ley Rodríguez, un trotamundo... mas
El hombre es de tez blanca pero tiene alma de negro. Lo dice su tumbao, su sabrosura, su caminar acompasado con el ritmo candente que corre acelerado por sus venas. Es Ley Rodríguez, un trotamundo incansable, juglar de la vida, poeta de la calle. A los cinco años ya se ganaba la vida vendiendo periódicos. Esa fue su primera escuela: la calle, la aventura citadina, sus personajes novelescos, su fragor, su clima, el día a día entre la exaltación y la fatalidad; el riesgo, el sentido de supervivencia, el inconfundible olor a asfalto. En ese terreno maduró con el tiempo su proyecto artístico, el mismo que compartió con Alex Torres, una de las voces estelares de la salsa, ex Guayacán, y en la actualidad líder de ‘Gracia Negra’, agrupación vanguardista de este género que repunta con un álbum que tiene un título de novela negra: ‘Calle lírica’: doce temas inéditos, autoría de Ley Rodríguez, quien también en este trabajo hace las veces de compositor, productor y arreglista. Letras como: ‘Willie y Rubén’ (homenaje a Willie Colón y Rubén Blades), ‘Mi desagravio’, ‘Nuestro amor’, ‘Aventura’, ‘Raspao despechao pa’Nueva York’ y ‘Omnigente’, entre otros, dan cuenta del talento, la imaginación y la prosa lírica de Ley con esta, su ópera prima musical que, paradójicamente, ha sido más elogiada y reconocida en el exterior que en su propio país. Ley, que estudió música y técnica vocal con profesores particulares, que viajó a Nueva York para adelantar más estudios, que fue director de ‘Alma de Barrio’, que es consultor de proyectos sociales y culturales en sectores desprotegidos de la nación, se convierte en noticia de primera página con esta producción que marca un nuevo estilo de hacer salsa: un trabajo hecho a pulso y a conciencia, que retrata la calle en su pulsión y en su color local, al decir del escritor español, Juan José Millás, como la gran metáfora del mundo. Al compás de Ley. ¡Vaya, caballero! ‘Calle lírica’. ¡Vaya un título para una gran novela! “‘Calle lírica’ es un paisaje urbano pintado con melodías y vivencias de la contemporaneidad y la cotidianidad latinoamericana”. ¿Existe en realidad esa calle? “Por supuesto que existe, y a ella se puede uno asomar en cualquier ciudad del mundo: es el escenario donde todos tenemos algo en común y estamos ligados por el cordón umbilical de lo urbano, de ese ir y devenir, de su reciprocidad social”. ¿Desde cuándo usted es un hombre de la calle? “Yo tuve conciencia de la realidad de la calle desde mi primera infancia, cuando tuve el primer contacto con los periódicos, porque yo fui voceador de prensa, y entre esos papeles me di cuenta de que el mundo real estaba plasmado ahí, y no en lo que nos vendía a diario en la televisión”. ¿Cuánto duró como voceador de prensa? “De los 5 a los 9 años. Es que mis primeros juguetes fueron los periódicos y los libros”. ¿Y cómo sentía la calle en ese entonces? “Debo decir que la sentía tensa, turbia y con una intensidad cinematográfica. A mí me tocó en suerte una calle muy agitada y trepidante en la efervescencia revolucionaria de los años 70’s, en Río Blanco, Tolima. Allí se escuchaba el tableteo de la metralla, los gritos desesperados de viudas y huérfanos, todo esto agregado al incesante pregón de los vendedores ambulantes, del ayudante de flota anunciando la ruta, las exclamaciones de los borrachos caudillescos en épocas electorales, y la vocecita mía ofreciendo el periódico del día”. ¿Ha escrito crónicas de esa calle? “He escrito más de quinientas, de las cuales ahora revelo doce en este primer álbum de ‘Gracia negra’”. ¿Cómo se hizo músico? “En la calle. Esa fue mi gran escuela. En la calle percibí los primeros toques que me incitaron a hacer música. Yo tuve una influencia muy sólida en este ámbito: desde los tangos que me arrullaron en la casa; los pasillos, los bambucos, torbellinos y vallenatos de las tertulias caseras, hasta la salsa dura de Ismael Rivera, Rubén Blades, Willie Colón, que escuchaba en la onda corta de la radio”. ¿Y cómo se unió a Alex Torres? “Lo conocí cuando él estaba en Guayacán Orquesta. En un encuentro que tuvimos en Nueva York, decidimos que yo regresaría al país a iniciar este proyecto”. Tamaña empresa esta de la música. ¿Quién le respaldó esta utopía? “Bueno, esto se hizo de manera independiente. Entre Alex y yo pusimos sobre la mesa los ahorros que teníamos, y contamos con la gran colaboración de los músicos que grabaron, sin alarde de intereses materiales. Fue una empresa quijotesca en la que invertimos más nuestros deseos de hacer arte, que el mismo poder del metal”. ¿Cuánto tiempo de maduración tuvo este proyecto? “Por lo menos ocho años. Y vea usted que hasta ahora estamos viendo los resultados”. ¿Y de qué ha vivido usted en todo este tiempo? “He hecho proyectos de educación y cultura con alcaldías, colaboraciones editoriales, libretos, humor, teatro, y negocios particulares. Es decir: para mí la música es el alma y le estómago su hipoteca”. ¿Qué nombre podría recibir el tipo de salsa que hacen ustedes? “Unos han dicho que es salsa social, otros, de vanguardia, unos más dicen que es una salsa diferente; yo diría que todas las anteriores”. ¿Pa’bailá y gozá, como decía Jhonny Pacheco? “Y pa’escuchá. Porque esta salsa, además del golpe que reclama el bailador, tiene texto y mensaje”. ¿Sigue siendo un hombre de la calle? “Hoy más que nunca”. ¿Y cuál es la ley de la calle? “El saber dar buenos pasos”.
Gracia Negra
Entrevista realizada por el portal sofonia.com, en ella menciona nuestro trabajo Calle Lirica del dúo salsero, aquí le tenemos un adelanto de la entrevista